Danza, teatro y música


Anoche me invitaron a presenciar una obra de teatro protagonizada por una sobrina de alguien muy cercano. Antes que nada debo decir que le tengo mucho cariño a esa chiquilla pues se lleva muy bien con uno de mis hijos. Es precisamente esa relación de afecto la que me ha llevado a escribir acerca del suceso.

Seré concisa en lo que respecta a mi criterio sobre su incursión en las tablas: como actriz le veo mucho futuro, como cantante le falta fuerza en la voz y como danzarina, además de necesitar más gracia, creo que le falta una buena dosis de entrenamiento por lo menos para parecer más elástica.

Las actuaciones teatrales resultan encantadoras con un fondo musical acorde con el guión, el ritmo de los acontecimientos y muchas veces ha salvado una mala interpretación. Algo supremamente esencial en la interpretación teatral es la capacidad histriónica, sin la cual el actor sólo sería él mismo en cada escena.

Subir a un escenario no es nada fácil, pero si fuese el caso de un cantante debería haber hecho vocalizaciones, haber trotado a diario y realizado los ejercicios pertinentes a su carrera, de tal manera que el encuentro con el público se torne maravilloso.

Cuando alguien desea dedicarse a la danza lo primero que tiene que saber es si su cuerpo está en condiciones físicas y estéticas para realizar dicho trabajo. Esa persona debería balancear muy bien sus alimentos, tendría que hacer gimnasia por lo menos dos veces diarias y adecuar sus movimientos estrictamente al ritmo que el público escucha al momento de su presentación.

Algo titánico, según mi concepto, es querer abarcar los tres artes en uno, pues el protagonista tendría que ser muy disciplinado y realmente genial para que todo le salga perfectamente y su público no se sienta defraudado, así fuese una función benéfica.

Los teatreros son personas que lo dan todo y generalmente dejan en el escenario parte de su vida. En algunos países latinoamericanos no es muy común que la gente acuda en masa a distraerse con una obra de teatro, por lo general este tipo de actores si no encuentran quién los subvencione pueden carecer de muchos elementos vitales, la mayoría de ellos mueren en la miseria o cerca de ella.

Aún así quien posea oportunidad de tener a su disposición un teatro para actuar, no debería hacerlo a la ligera, debe recordar que el público se diluye cuando no encuentra algo que en verdad le fascine.

Insisto. Para actuar, cantar y danzar en una misma obra, la actriz o actor deberá estar tocado por los dioses para lograr un éxito irrefutable.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Un gran saludo desde Colombia, te habla el hijo de Gloria, Luis Carlos para decirte que te extrañamos demasiado y esperamos tu pronto regreso. En cuanto al artículo, estoy totalmente de acuerdo con tu posición con respecto a la disciplina, lo único que me gustaría que se tuviera en cuenta que con todo el esfuerzo que se hacen las cosas, en este caso una dramatización, muchas veces el temor y el nerviosismo puede llevar a que una persona cometa un error;así sea teniendo casi todo perfectamente en su lugar tanto la coreografía o la rutina hasta el mismo escenario; por lo tanto, en mi punto de vista, consideraría que no se debería darle tanta importancia a la necesidad de perfección sino también el empeño y el amor con el que se hagan las cosas, pero sobretodo, con mucha seguridad de que van a salir excelentes. Espero una pronta respuesta y correciones acerca de mi comentario ya que me gustaría que me enseñaras como hacer una crítica ya que la manera como lo haces es concisa y desarollada para que todo el público la logre entender.
Con cariño,
Luis Carlos

Rud dijo...

Una de las cosas más agradables del mundo es saber que nos extrañan, ¿será que hemos dejado una impronta de buenos recuerdos?
Acerca del comentario sobre el artículo, todo lo que dices es muy acertado, eres un chiquillo inteligente y de buenos sentimientos. Si alguien está empezando en el teatro deberá aprender todo cuanto sea conveniente hacer para luego desempeñarse muy bien sobre las tablas. En realidad no me he referido exactamente a una colegiala que temerosamente se enfrenta al público; he hablado sobre una persona que desde niña vio a su madre en escenarios de varios sitios del mundo, es una señorita que, además de haber estudiado arte dramático, también realizó estudios de música.
Mis observaciones iban dirigidas a todos quienes quieran incursionar en algo, mi punto de vista: es mejor especializarse, que tratar de abarcarlo todo y no hacer nada bien.
Por ejemplo, tú deseas estudiar medicina. Estoy segura que serás médico algún día, si al terminar, no tienes una especialidad difícilmente tendrás éxito, o serías el médico mediocre de barrio, o tendrías que dedicarte a atender indigentes gratuitamente.
Es muy importante la especialización en cualquier materia, de lo contrario sólo rendimos culto a la mediocridad.
¿Cómo hacer un comentario?
Simplemente sé tú mismo, expresa con franqueza tus sentimientos o tus puntos de vista; eso sí, debes estar muy enterado del tema, estar actualizado, leer mucho y, en lo posible, agregar las fuentes, aunque hay temas triviales que no las requieren.
¿Hacerte correcciones?
En general tienes excelente redacción y ortografía…
Parece que por escribir rápido sólo le digitaste una c a corrección y una r a desarrollada; pero errores tipográficos cometemos todos cuando queremos enviar apresuradamente algo.
Saludos y un fuerte abrazo