He estado en el limbo


Aunque hace algún tiempo, los encargados del Vaticano dijeron que la figura del limbo quedaba descartada porque “comprobaron” que hubo una especie de equivocación pues el papa no ha sido tan infalible como se creía; yo francamente que desde hace un par de semanas he estado allí.

Una especie de influenza estacionaria me he llevado. Todo se ve como entre neblina, algo así como Londres en ciertas épocas del año. No es del todo malo pues no se ven, ni se leen noticias, no se puede hablar mucho, o hay que hacerlo con una voz muy baja, tampoco cantar pues asustaríamos hasta a los grillos, dar explicaciones tampoco pues el cerebro se encuentra inmerso en una especie de galimatías o confusión que vendría a ser lo mismo.

Estar en el limbo nos hace soñar en todo aquello que realizaremos tan pronto salgamos de allí, incluso pensamos en cómo mejorar al mundo, por ejemplo: cómo recolectar el agua de la lluvia cuando abunda en un lugar para guardarla para la sequía, o para conducirla hacia donde el estío ha matado hasta el ganado.

Lo inconveniente de encontrarse en el limbo es que las obligaciones se tornan más difíciles, el tiempo se desvanece y ni siquiera se pueden visitar los blogs de los amigos. Es increíble, pero ni siquiera el doctor sonrisas logró sacarme de allí.

Afortunadamente ya me encuentro de salida. Los ensueños, el descanso, la fiebre, los cuidados, las comidas especiales, los mimos y otros quieren retenerme; pero la realidad, la vida y la enorme belleza que ella encierra me atraen.

2 comentarios:

Luis dijo...

Hola Rud:
Debe de haber sido una experiencia muy edificante, esa de visitar ese lugar paradisíaco...la pena es que no pudieses conectar con el mundo bloggero...
Si puedes, evita que las jerarquías vaticanas, te hagan escribir algún libro sobre el tema...
Feliz regreso a nuestro imperfecto mundo.
Cordiales saludos,
Luis

Rud dijo...

Hola, Luis
Si escribiese sobre ciertos temas, seguro que les podría dar un ataque a los inquilinos del Vaticano.
Muchas gracias por tus comentarios, cordiales saludos