Hans Christian Andersen

¿Quién no ha leído o escuchado acerca de: “El patito feo”, “El traje nuevo del emperador”, “La reina de las nieves”, “Las zapatillas rojas”, “El soldadito de plomo”, “El ruiseñor”, “El sastrecillo valiente” y “La sirenita”?

Pues ellas son obras del escritor danés Hans Christian Andersen, quien nació el 2 de abril de 1805 en Odense, Dinamarca, cuando la primavera comenzaba a embellecer los jardines y el aire tibiecito invitaba a soñar; quizás por ello Hans, decidió en algún momento de su difícil existencia dedicarse a escribir cuentos infantiles.

No creo que pensara en aquella época que 205 años después, gente de todo el planeta lo recordara con cariño. Gracias a sus más de 150 cuentos infantiles devino como uno de los grandes autores de la literatura mundial. Su obra abrió nuevas perspectivas tanto de estilo como de contenido, por su innovador empleo del lenguaje cotidiano y expresiones de los sentimientos e ideas que antiguamente se pensaba que estaban lejos de la comprensión de los niños.

Sus cuentos que son verdaderas obras maestras de la literatura universal, han sido traducidos a más de 80 idiomas y han sido adaptados a obras de teatro, ballet, películas y obras de escultura y pintura.

Todos quienes hayan viajado a Copenhague, conocen la pequeña estatua de la sirenita situada en Langelinie en la entrada al puerto de Copenhague que fuera realizada por Edvard Eriksen en honor al escritor Hans Christian Anderesen.

A propósito de la sirenita, el pasado 23 de marzo “abandonó” el puerto de Copenhague para viajar a Shanghai, donde será la estrella del pabellón danés durante seis meses. Es que la sirenita se ha convertido en un símbolo turístico para Copenhague, tal como la Torre Eiffel lo es para París o la Ópera diseñada por Jørn Utzon lo es para Sidney.


9 comentarios:

Jimmy dijo...

Pues por ahí he oído que la ministra de igualdad dice que los cuentos como los de Hans eran discriminatorios.

¡Mira, una idea para poner en el blog!

Estos cuentos, aparentemente simples, tienen la grandeza de tener un trasfondo, una moraleja que queda grabada en la memoria sin darnos cuenta, y que luego nos sirve en el futuro.

Un saludo

Alí Reyes dijo...

Me gusta esta entrada pues hace honor a un género literario que ha sido tratado como una cenicienta por el resto de los escritores, novelistas, poetas, ensayistas etc. Pero resulta que el cuento es el más complicado de todos los géneros literarios (dicho hasta el cansancio por todos los escritires que se han aventurado en dicho menester) De hecho, me considero un cuntista y lo digo con mucha honra, además de un tiempo para acá decidí no leer más novelas sino puro cuentos ¡Y cuántas satisfacciones me han deparado!

Luis dijo...

Hola Rud:
Me parece que los he leido todos, los cuentos que mencionas...
En mi época, eran casi una asignatura obligada.
Tu recuerdo al autor es muy loable.
Que tengas un feliz fin de semana,
Luis

esteban lob dijo...

Hola Rud:

La figura de ese notable escritor de obras infantiles, me hace recordar mi fugaz visita a Copenhague de unas pocas horas, de paso entre Suecia y Alemania, en el ya lejano 1965. Se me antojó al lado de su figura de piedra, una personalidad danesa eterna, objeto de la veneración más grande.

Cariños.

M. J. Verdú dijo...

Un placer descubrir y aterrizar en tu villa encantada...ojalá la hubiera descubierto antes

Ricardo Tribin dijo...

Lindo...lindisimo post mi muy querida amiga Rud.

Hans Christian Andersen representa algo muy bello para nuestra ninez.

Te dejo un abrazo bien grande.......

Rud dijo...

Muchas gracias, Jimmy, Alí, Luis, Esteban, María Jesús y Ricardo, el próximo jueves pienso escribir acerca de los cuentos infantiles en general para hacer honor a las opiniones de Jimmy y Alí.
Cordiales saludos a todos

M. J. Verdú dijo...

Un placer regresar a este mundo de fantasía

M. J. Verdú dijo...

Paso a dejarte un cordial saludo en esta mañana de sábdo. Me encantó leerte y disfrutar de tus bellos e inspiradores escritos. Como siempre, un placer visitarte