Desde hace algún tiempo he leído acerca de jóvenes
violadas obligadas a casarse con su agresor, de horribles castigos a mujeres
hermanas de hombres agresores en Paquistán, de chica aparentemente musulmana,
condenada a muerte por haberse casado con un cristiano; pero lo que más me ha
dolido de tanta injusticia ha sido ver en la prensa uno de los acontecimientos
más ignominiosos realizado por el padre y los hermanos de una joven embarazada que
decidió casarse con el hombre que amaba y no con quien le imponía su familia.
¿En dónde están las organizaciones de Derechos
Humanos?
¿Por qué no se han pronunciado al respecto?
¿Por qué callan los grupos feministas que realizan
manifestaciones hasta ridículas por asuntos sin mayor importancia y no se
pronuncian respecto de la crueldad con la cual son tratadas muchísimas mujeres
en el mundo?
Probablemente muchos han de decir que la Human
Rights Watch produce informes de investigación sobre violaciones de normas
internacionales de derechos humanos, obedeciendo a la Declaración Universal de
los Derechos Humanos y a lo que percibe como otras normas de derechos humanos
aceptadas internacionalmente.
Sé que estos informes son utilizados como base
para denunciar ante la comunidad internacional los abusos y forzar a los
gobiernos y a las organizaciones internacionales a efectuar reformas; pero ¿por
qué no presionar para que dichas reformas sean puestas en práctica?