El SIDA I

Fue en 1983 cuando el mundo enmudeció ante una nueva amenaza, había entrado en escena el síndrome de inmuno deficiencia adquirida (SIDA) y los espectadores del teatro mundial sintieron un leve estremecimiento pues su principal vía de contagio es, ha sido y será a través de la sangre y las relaciones sexuales. Por lo tanto nadie está libre de contraer dicha enfermedad, ni siquiera aquellos que mojigatamente aconsejan la “castidad” como medida preventiva.


Todos debemos ayudar a concienciar a nuestros jóvenes y a las personas de bajos niveles culturales que no se trata de una enfermedad de homosexuales, como creen muchísimos; se trata de un mal que puede contagiarse a través de una diálisis, una transfusión, por utilizar agujas o cuchillas de afeitar infectadas y por relaciones íntimas con personas que son portadoras del virus. No hay que olvidar que los niños pueden ser infectados por sus madres portadoras durante la gestación o el parto (transmisión peri natal). En este último caso una buena estrategia consiste en asesorar a la futura madre e invitarla a hacerse un test para saber si es o no portadora y tratar, en lo posible, de prevenir la infección del bebé.

¿Cómo se sabe si alguien es portador?
Ni el mago Merlín hubiese sido capaz de adivinarlo, pues los síntomas se desarrollan después de un largo tiempo de incubación, todo depende de la salud y constitución física del individuo. Si alguien desea saber si está contagiado debe hacerse un examen de laboratorio.

¿Quiénes están en riesgo?
Todas aquellas personas que tienen encuentros sexuales con desconocidos, con personas que viven de la prostitución: pero desafortunadamente hay hombres que tienen este tipo de aventuras y luego han contaminado a sus parejas. Sin embargo, cualquiera lo puede contraer si no se toman medidas preventivas. Nunca debemos creer que se trate de algo que sólo les sucede a los demás. No es verdad. Todos somos susceptibles de sufrirlo. Hay muchísima gente que anda muy tranquila por ahí sin saber que ya son portadores.

Celebrar un día mundial de lucha contra el SIDA debería incluir una campaña masiva para la concienciación de la población. Nada se saca con actos absurdos que no conducen sino al despilfarro de los fondos públicos. Lo que deberían hacer en un día así es donar millones de condones para que el vulgo no vaya desprevenido a su encuentro con Venus. Por lo menos esa fue una grata noticia de El tiempo de Bogotá: repartirán anticonceptivos gratis, ello además de evitar embarazos indeseados, previene el contagio de enfermedades de transmisión sexual.

Según un artículo publicado el 02 de Dic en el diario El país, el Banco Mundial ha denunciado que las estrategias actuales para tratar de erradicar esa enfermedad están mal concebidas pues los fallecidos y nuevos infectados en el 2005 han superado las cifras de años anteriores. En este año se han producido cinco millones de nuevas infecciones.

La OMS autorizó dos nuevos medicamentos contra el VIH (virus de inmuno deficiencia adquirida), pero esas medicinas no llegan realmente a toda la población que se halla inmersa en el dolor de una enfermedad incurable. En muchas partes del mundo las Seguridades Sociales, incluso aquellas privadas, no contemplan tratamientos o atención para este tipo de mal.

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