La expresión de sentimientos


Han sido muy pocos los textos que he escrito y que tienen algo qué ver conmigo. Quizás aquellos en donde hablo acerca de los hijos y, de alguna manera, pienso en ellos al momento de expresar sentimiento maternales, eso ciertamente es inevitable pues hemos tenido una relación bellísima.

El jueves 14 del presente publiqué el artículo titulado “Ni de aquí, ni de allá”. Sorprendentemente me han telefoneado algunas personas para decirme que lamentan que la relación con mi esposo no sea buena.

¿De dónde han sacado dicho disparate?

En ningún momento he abordado un tema íntimo; pues considero que lo que sucede en
un hogar, únicamente debe importar a sus miembros. Me he referido al arraigado sentimiento patrio, que en muchas personas es supremamente fuerte, pero para otras poco a poco se desvanece cuando se encuentran fuertes circunstancias que nos ponen los pies sobre la tierra.

Hablé en primera persona y en plural, pero casi la totalidad de aquello lo había escuchado a muchas amigas que son de diferentes lugares del planeta y viven en el país de su marido. No he manifestado nada textual, simplemente vi que el tema se prestaba para redactar un comentario poniendo una buena dosis de sentimientos.

Cuando escribo, siento una especie de inspiración, mis dedos vuelan sobre el teclado, me dejo llevar por la imaginación y por la información que necesite, según el tema y dejo plasmado un poco de mí, pero no de mis vivencias conyugales. Es muy semejante a lo que me sucede cuando dibujo o pinto: escucho unas melodías hermosas, pienso en situaciones que me han llenado de júbilo y que he imaginado que podría recrearlas en un cuadro.

Me muevo en el mundo de lo estético, de lo dulce y adorable. Me deleito con la belleza, el goce, el amor, el esplendor de la naturaleza, el gusto por las fragancias agradables y la ternura. Mis obras están llenas de alegría, de luz, de esperanza, de magia, de música… son un canto a la vida. Ninguna de ellas representa algo que haya vivido, contienen mis elucubraciones sobre algunos temas, algunos sueños, ilusiones expresadas por otros seres, muchas ideas…

La expresión de sentimientos casi nunca habla de los propios; alguna vez escuché en un noticiero de TV que le demostraban a un canto-autor el pesar porque supuestamente su mujer lo había dejado; éste sorprendido dijo:

- Mi relación matrimonial está de maravilla, ¿a qué se debe tu preocupación? Pensé que era autobiográfico aquello de “y quién es él, en qué lugar se enamoró de ti…” Contestó el confundido locutor.

¿Y qué pasó con aquello de ser de ningún lado? Algo muy agradable, ser ciudadana del mundo es algo que siempre me ha interesado.

La fiesta de san Juan


Se cree que los celtas, muchísimos años antes del cristianismo, celebraban unas fiestas especiales la noche más corta del año, el día del solsticio de verano en el hemisferio norte. Con el advenimiento del cristianismo, la iglesia acomodó las fiestas existentes con las suyas y he ahí que nació la fiesta de san Juan.

En la antigüedad había la creencia que el sol no volvería a su esplendor total pues, después de esa fecha, los días eran cada vez más cortos. Así se crearon los rituales con el fuego: fogatas, hogueras… para simbolizar el poder del sol y ayudarle a renovar su energía.

El rito purificador de las hogueras se completa con agua y plantas mágicas, que se dejan en agua toda la noche para lavarse por la mañana. Por eso cada 23 de junio los mercados por la mañanas tienen fragancia de: flores, romero, menta, manzanilla, rosas..., que se venden por ramilletes en puestos ocasionales sólo durante ese día.

En España, la noche de San Juan (23 de junio), es de tradiciones mágicas, se caracteriza por la multitud de hogueras que iluminan la noche, la gente arroja a la hoguera antes de su encendido pequeños objetos, conjuros, deseos e incluso los jóvenes lanzan pequeñas anotaciones del curso, todo ello con el objetivo de hacer desaparecer los malos espíritus.

La costumbre más común en todas las localidades es el baile del fuego; además el rito de mojarse los pies en el mar o en cualquier fuente de agua a las doce de la noche para limpiar el espíritu de algunos males.

Queramos o no, la festividad de San Juan es de origen pagano y desde sus orígenes los pueblos de Europa ya encendían hogueras en sus campos durante la noche anterior. Actualmente, son muchas las personas que aprovechan la noche más corta del año para celebrar la llegada del calor con rituales y costumbres muy diversas.

Los españoles durante la colonia trajeron a América esta costumbre, ya cristianizada. Es así que en diferentes lugares de Sudamérica existe dicha celebración, no como copia de las que se realizan en la península ibérica sino que cada región tiene su propia manera de festejar, como en Bolivia, en Chile, en Colombia, en la amazonía peruana y en Venezuela. En la serranía andina norte de Ecuador celebran algo llamado inty raymi:
es la principal celebración de los pueblos indígenas de los Andes para dar la bienvenida al solsticio de verano cuya fecha clave es el 21 de junio, que marca el final y el comienzo del año agrícola.”
Esta es una fecha (la de san Juan), en la que abundan las leyendas fantásticas.

Quienes creen en ello son unánimes al decir que es un período en el que se abren de par en par las invisibles puertas del otro lado del espejo: se permite el acceso a grutas, castillos y palacios encantados; salen a dar un vespertino paseo a la luz de la Luna seres femeninos misteriosos en torno a sus infranqueables moradas; afloran enjambres de encantados espíritus de duendecillos enamorados amparados en la oscuridad de la noche y en los matorrales; el amor florece y debes tener pareja, pues si esa noche duermes solo, te irá mal en amores el resto del año.


En la noche mágica de san Juan, la atmósfera se carga de un aliento sobrenatural que impregna cada lugar mágico del planeta, es el momento propicio para el amor, para estremecernos, ilusionarnos, reflexionar… y si no hay nada mejor qué hacer, narrar a nuestros hijos, nietos o amigos toda clase de cuentos y anécdotas que nos sepamos o tomar una guitarra y entonar dulces melodías alrededor de la hoguera.

Al día siguiente, muy temprano debes ver tu sombra, si no te ves la cabeza significa que cualquier día de los próximos 365, morirás, ja.

No ser ni de aquí, ni de allá.


Lo que hoy expreso lo entenderá mejor alguien que haya vivido muchos años alejado de su país. Lo he escrito después de haber leído la bitácora de una persona que únicamente ha escrito quejas de su país de residencia.

¡Patria! te adoro en mi silencio mudo,
y temo profanar tu nombre santo.
Por ti he gozado y padecido tanto
cuanto lengua mortal decir no pudo.
No te pido el amparo de tu escudo,
sino la dulce sombra de tu manto:
quiero en tu seno derramar mi llanto,
vivir, morir en ti pobre y desnudo.
Ni poder, ni esplendor, ni lozanía, son razones de amar.
Otro es el lazo que nadie, nunca, desatar podría.
Amo yo por instinto tu regazo,
madre, eres tú de la familia mía;
¡Patria!
¡De tus entrañas soy pedazo!


Desconozco quien escribió ese poema, me lo hicieron aprender en el colegio para recitarlo en el momento de izar la bandera. Lo decía mecánicamente pues a esa edad ni siquiera tenía consciencia de lo que significaba patria. Estaba muy lejos de pensar que algún día diría lo siguiente:

Si parto del principio que en el mundo existe más amor que odio, en todas partes podemos encontrar gente maravillosa, gentil, atenta, amable, honrada, generosa, correcta y con abundante ternura para dar y recibir; al menos si el grupo no es mayoritariamente xenófobo.

Cuando por amor o por obligación laboral tenemos que dejar nuestro país y vivir un largo tiempo en uno que es “prestado”, comenzamos por ver lo malo de la nación receptora, sobretodo, si no ha habido buena acogida por parte de los familiares de la pareja; todo nos parece inconveniente y cual amor lejano, idealizamos aquella patria que nos fue arrebatada, aquel terruño amado en donde las fragancias, paisajes y habitantes nos eran tan entrañablemente conocidos.

La soledad nos invade aunque estemos rodeados de muchos amables desconocidos y es más intensa cuando en nuestro entorno tratamos personas que no se cansan de recordarnos una y otra vez que nuestras opiniones son inválidas porque no hemos nacido en ese lugar, nuestros conceptos acerca de política mejor esconderlos muy dentro pues nada tenemos que decir, si posiblemente, según ellos, nuestro país está peor. Nada más lamentable que la posición de algunos cuando con tono triunfal dicen: “eso no se acostumbra aquí”, “aquello será algo habitual en tu país pero aquí somos diferentes…” “Yo por lo menos soy de aquí y mucha gente me conoce…”

Es ahí cuando se toma la decisión de edificar un mundo propio en el cual únicamente entra la familia, unos pocos “amigos”, los condiscípulos propios o de los hijos y aquellos que por cuestiones laborares, de estudio o del género que sea tenemos que tratar.

Y seguimos por el camino de la vida viendo pasar las estaciones, trabajando sin descanso, observando extasiados la naturaleza, los acontecimientos, el maravilloso crecimiento de los hijos y todo aquel sentir primero deviene en nostalgia de una música grata, de un sabor añorado y nos damos cuenta que ya no tenemos patria, que ahora somos de ningún lado…

Colombia “italianizada”


Dicen los historiadores colombianos que allá por el año 1897 llegó el cine a Colombia, dos años después que los hermanos Lumière estrenaran el cinematógrafo en París. El cine en Colombia se desarrolló gracias a la iniciativa privada de los hermanos Vicenzo y Francesco Di Domenico, no sólo impulsaron la presentación de cine sino que se aventuraron a realizar sus propios documentales. El primero de ellos fue: “Drama del 5 de octubre.”

Los hermanos Di Domenico también construyeron la primera sala de cine llamada “Salón Olimpia”.

Pero no voy a hablar de cine, sino sobre la ingerencia positiva que algunos italianos han tenido en Colombia:

La música de nuestro himno nacional fue compuesta por Orestes Sindici.

El primer mapa del territorio colombiano fue realizado por don Agustín Codazzi.

El puente del Humilladero en Popayán fue construido por el arquitecto Fray Serafín Barbetti.

El encargado de levantar los planos para la construcción de la catedral de Villanueva en Medellín fue el ingeniero Felipe Crosti.

El diseño arquitectónico de la fachada frontal del Capitolio Nacional fue obra del arquitecto italiano Pietro Cantini quien también fuera el encargado de la construcción del Teatro Colón, inaugurado el 26 de octubre de 1895, su función de estreno: presentación de la ópera Ernani de Giuseppe Verdi.

La hermosa estatua de “La Rebeca” en Bogotá fue esculpida por Tito Ricci.

El monumento a Cristo Rey en Cali lo hicieron los hermanos Alindo y Alideo Tazziori.

El Simón Bolívar de Medellín: Mascarioni.

El monumento Arco Iris de luces de la torre de Colpatria fue ideado y ejecutado por Gianni Capena, Massimo Morati y Fabio Novarese.

Y el Club del Comercio de Bucaramanga, construido por Pietro Colombo Monticoni.

Nuevamente la libertad de expresión en entredicho


La libertad de expresión es el derecho de todo individuo a expresar ideas libremente, y por tanto sin censura. Es un derecho fundamental defendido en la mayoría de Constituciones políticas del mundo.

Según el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos humanos, todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.

Naturalmente ello no quiere decir que cualquier persona, llámese periodista, comunicador social o pepe cortisona, pueda emitir juicios infundados o carentes de veracidad. Toda información debe asegurar el respeto a los derechos o a la reputación de los demás pues toda libertad conlleva un deber y eso está también reglado en la misma Declaración en el artículo 29:
“En el ejercicio de sus derechos y en el disfrute de sus libertades, toda persona estará solamente sujeta a las limitaciones establecidas por la ley con el único fin de asegurar el reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades de los demás, y de satisfacer las justas exigencias de la moral, del orden público y del bienestar general en una sociedad democrática.”
Uno de los condicionantes de toda democracia es el ejercicio de todas las libertades, todo gobierno que se precie de ejercer el mandato constitucional con equidad, justicia social y verdadera democracia, debe aceptar que haya voces discordes, que sus conciudadanos puedan oponerse sanamente a algunas de las tesis que enmarquen su programa gubernamental.

Todos tenemos derecho a la libertad de pensamiento y de expresión. Aunque parezca repetitivo, este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro procedimiento de nuestra elección.

No se puede restringir el derecho de expresión por vías o medios indirectos, tales como el abuso de controles oficiales o particulares de papel para periódicos, de frecuencias radioeléctricas, o de enseres y aparatos usados en la difusión de información o por cualesquier otro medio encaminado a impedir la comunicación y la circulación de ideas y opiniones.


Son las dictaduras o los gobiernos de corte totalitario quienes incumplen dichas disposiciones, son aquellos a quines molesta que la prensa investigue y saque a la luz sus oscuros proyectos.

La comunidad internacional debería boicotear a gobiernos de esta naturaleza.

No debemos olvidar que la posibilidad del disenso fomenta el avance de todo tipo: de las artes, las ciencias y la auténtica participación ciudadana en los destinos de su país.

Carta Nº 2 al Presidente Álvaro Uribe

¡Buenos días, señor Presidente!

Hasta el momento la mayor parte de los colombianos estamos muy contentos que usted haya sido reelegido para que pueda seguir con sus programas de Estado para sacar a Colombia del atolladero en que se encuentra debido a los grupos alzados en armas.

En los cuatro años anteriores la gente de las FARC no han dado signos de querer negociar la paz; únicamente se han manifestado por el cambio humanitario de secuestrados a cambio de reos de sus filas, pero para ello quieren que les “despejen” algunos municipios (Pradera y Florida en el Valle del Cauca), esto es dejar sin Dios ni Ley parte de nuestro territorio. Ciertamente me alegra muchísimo que usted, señor Presidente no haya accedido a que Colombia tuviera nuevamente un pedazo de terreno sin jurisdicción.

Sería magnífico que el intercambio se diera, pues esa pobre gente debe estar viviendo un infierno. Señor Presidente, usted que es un hombre muy inteligente ¿por qué no se ha apresurado a rescatarlos a la mayor brevedad posible?

Pensé que si en los años anteriores no hubo un gran avance con ese grupo debía ser que las Fuerzas armadas estaban preparando increíbles estrategias que darían la gran sorpresa en el segundo mandato.

Usted, doctor Uribe, ha logrado desmovilizar a decenas de miles de paramilitares, ha habido crecimiento económico, ha conseguido importantes logros en materia de Leyes necesarias para el mejoramiento de la Justicia, incluso los suyos en el Congreso pudieron modificar ciertos artículos constitucionales para que la reelección fuera un hecho; por tales razones creo que sí puede lograr que las personas secuestradas vuelvan a sus hogares después de tanto tiempo que no han tenido contacto con sus familiares. Es imperativa la negociación, pero sin despejes, Señor Presidente.

Doctor Uribe, ahora quiero expresarle unos interrogantes acerca de un tema que es motivo de preocupación, sobretodo para quienes viven fuera del país:

¿Por qué nuestro país no busca un acercamiento más profundo con nuestros vecinos y con los países latinoamericanos?

¿Por qué insistir tanto con nuestro socio del norte si hay posibilidades de integración con países hermanos?

Si la aprobación del TLC con los estadounidenses no fuera un hecho, al menos inmediato, ¿Por qué inquietarnos al extremo?

¿Por qué nos dejamos condicionar?

Colombia hace y ha hecho lo posible por erradicar ciertos problemas que no existieran sin no hubiese demanda de cierto producto. Es de todos sabido que cuando hay consumidores, surgen los productores.

Es verdad que ese país nos hace importantes compras, pero también es cierto que sus agricultores son subvencionados y nuestros campesinos pueden enfrentarse a un aprieto más, además de “aquello” que deben soportar a diario.

En otro tema hay algo que me inquieta sobremanera: en estos días se colecta el primer “impuesto de guerra”, según el diario El Tiempo
La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, DIAN, ha reiterado que el dinero que sea recaudado, 8,6 billones de pesos en los cuatro años, por este concepto será destinado a fortalecer y renovar los equipos de las Fuerzas Militares e incorporar un mayor pie de fuerza, para mantener el trabajo que se ha venido realizando en el tema de seguridad democrática.”

Don Álvaro, me parece que las partidas presupuestarias más grandes que tiene nuestro país van destinadas a las fuerzas del orden, sin contar con las ayudas externas para el plan patriota para perseguir a quienes sabemos.

¿Por qué no financiamos mejor la paz?

Dr. Uribe, cuando me enteré que había sido aprobado ese impuesto creí que era para invertirlo en gestión social encaminada a restituir los predios perdidos a todos los desplazados o para la realización de infraestructuras necesarias para hacer frente a los nuevos programas de integración comercial, para dotar los hospitales de lo necesario para que los desposeídos tengan mejor atención médica;
o para desarrollo del sector agropecuario, para investigación científica encaminada a mejorar la educación, cultura y vida de los colombianos.

Señor Presidente, antes de despedirme quiero que sepa que la mayoría de colmbianos creemos que las declaraciones del señor Mancuso no son más que una vil estrategia para enlodar el buen nombre de funcionarios públicos, de gerentes de grandes empresas y de altos mandos militares.
Es una especie de venganza porque lo han hecho declarar sus crímenes. Tranquilo, don Álvaro, se nota que ese paramilitar lo que desea es echar una columna de humo sobre el tema para que parezca que sus atrocidades son nada. La Fiscalía esclarecerá el asunto, ese señor tendrá que presentar pruebas irrefutables de sus aseveraciones.

Ya me alargué y sé que su-merced trabaja mucho por nuestro país y no tiene tiempo de leer largas misivas.

Saludos especiales para su esposa y los niños
¡Buena suerte!

Oposición al gobierno de turno

Estoy segura que casi la totalidad de las Constituciones políticas de los países que viven en estado de derecho contemplan la facultad de hacer sana oposición a quien esté gobernando. En tal caso los movimientos o partidos políticos que no participen de dicho gobierno pueden ejercer, dentro de lo que determinen las leyes, una oposición crítica y, sobretodo, proponer alternativas viables sobre políticas gubernamentales.

Quien sea que detente el poder no puede arrogarse la libertad de insultar, descalificar, perseguir, maltratar y tratar de eliminar a sus contrincantes políticos, aún pisoteando los contenidos constitucionales. Ese tipo de gobernantes deberían de saber que es muy sano que haya discrepancias pues aprendemos mucho con la diversidad de criterios.

En las democracias más avanzadas del mundo moderno, la oposición es parte fundamental de las mismas y los ciudadanos la ejercen de manera frontal, clara, precisa y valiente; sin miedo a ser tachados como resentidos sociales, subversivos, antipatriotas, amigos de la confrontación y del terrorismo.

Cuidado con aquellos gobiernos que han comenzado a atacar a los medios de comunicación, que se refieren a los representantes de otros partidos políticos como corruptos, mostrándolos como una especie de peste de su país tratando de debilitar por completo a sus oponentes.


Es muy saludable que haya grupos que piensen diferente. Ello no quiere decir que esas personas tengan como único fin destruir las instituciones del Estado o que deseen hacerle daño a la nación, o que sean egoístas que no piensen es su patria.

No podemos desacreditar a quienes no razonan igual a nosotros. Un gobierno no puede enrumbarse por el camino de las estrategias beligerantes que lo único que hacen es construir odio y miseria.

Día de la madre


Lo mejor que me ha pasado es haber tenido hijos con el hombre que he amado toda la vida. Ellos han llenado mi existencia de momentos maravillosos, han sido razón para que vaya hasta mis propios límites y supere infinidad de dificultades que han rondado mi camino.

Sin ellos no hubiera aprendido que podemos darlo todo sin esperar algo a cambio; no habría descubierto la satisfacción de verlos comer aquello que tanto les agrada, aunque yo me privara de hacerlo; no hubiera sabido que la felicidad es verlos reír, que su alegría es tan mía como sus desánimos.

Para mí la maternidad ha sido una fuente mágica de oportunidades para enriquecerme intelectualmente al ritmo del crecimiento físico emocional y cultural de mis hijitos con fascinantes pinceladas de ternura, amor, fantasía, dulzura y paz.

Ha sido una canción de cuna, un tenderme en el césped a observar las hormigas, la búsqueda de alimento para una ranita triste, una visita al zoológico, un paseo en bici, un lanzamiento frustrado desde el trampolín de la piscina, un postre de navidad, la búsqueda de un huevo de pascua, las notas indecisas en la guitarra…

Ha sido la constancia hasta lograr la meta, un himno a la medianoche, un cuento sin fin, un despertar afiebrado, una dulce melodía, un dibujo de Uderzo, un escondite secreto junto al río, un libro de los cuentos de Pombo, unos videos de “Érase una vez el hombre”, unas grabaciones de Carl Sagan, unos residuos de algo en los bolsillos, unas lágrimas por el primer amor…

Mis amadísimos hijos han sido como aire fresco en el ardiente verano, como acogedora cabaña en la desolada montaña, como suave brisa después del vendaval,
como limpio manantial en medio del desierto.

Doy gracias, de un lado, a su padre que tuvo la valentía de ayudarme en la hermosa tarea y a mi Dios por haberme dado la oportunidad de criarlos, de amarlos como a nadie, de darles aquello que yo no tuve, de verlos crecer poco a poco, y, sobretodo, de haber podido asistir al bellísimo espectáculo de su propia transformación.

El día del trabajo


Siempre me he preguntado por qué hay asueto el día del trabajo. Ese día deberíamos todos rendir culto a aquello que enaltece al ser humano, esto es la labor cotidiana.

El trabajo es algo inherente al hombre, es su patrimonio exclusivo, una eterna necesidad natural y quizás la primera condición de nuestra vida.

Deberíamos laborar con mucha alegría puesto que se trata de una actividad racional encaminada a la producción de bienes materiales en el que el ser humano ejerce su influjo sobre la naturaleza para adaptar sus elementos a sus necesidades; un componente determinante en el desarrollo de cualquier sociedad.

El factor decisivo de toda producción es la fuerza de trabajo del hombre, ello es fundamental para elevar el nivel de vida y la producción de capital en cualquier país, cuyo resultado trae bienestar a sus ciudadanos.

Mucha gente me ha preguntado cuál fue el detonante para que exista esta celebración a nivel internacional, aquí el dato:

En 1886, el Presidente de los Estados Unidos, Andrew Johnson, promulgó la llamada Ley Ingersoll, que establecía 8 horas de trabajo diarias. Por alguna razón los empresarios hicieron caso omiso a esa disposición lo que desencadenó los reclamos de las organizaciones laborales y sindicales de Estados Unidos que se movilizaron y comenzaron a luchar por el cumplimiento de dicha Ley paralizando el país productivo con más de cinco mil huelgas.

Aquellas manifestaciones llegaron al límite el 1° de mayo de ese mismo año, cuyo episodio más famoso fue el ocurrido en Chicago en el que luego de grandes enfrentamientos y una terrible represión hubo varios muertos y muchos heridos. Algunos líderes anarquistas fueron hechos responsables, fueron acusados, juzgados sumariamente y ejecutados en noviembre del año siguiente y pasaron a la historia como “los mártires de Chicago”.

Según “La Prensa gráfica”, durante el Congreso de la Asociación Internacional de Sindicatos europeos de 1889, celebrado en París, el 1º de mayo quedó instituido como el “Día Internacional del Trabajador”.


En la actualidad la mayoría de empleados cuentan con el apoyo de sindicatos que han luchado por la obtención de excelentes beneficios de sus afiliados, los avances en contratación, sueldos, prestaciones sociales y todas las leyes que han entrado en vigor son fruto de reivindicaciones de los dirigentes de esos grupos.

La realidad es que desde la época en que sucedió lo de Chicago, hasta el momento,
la masa trabajadora ha logrado a través de las reformas laborales un avance inusitado. Únicamente falta equiparar los sueldos de acuerdo a la capacidad y rendimiento del trabajador; no verlo venido a menos en razón de sexo, edad, nacionalidad o raza.

Clases forzosas de religión


En febrero del año en curso el Ministerio de Educación colombiano expidió un decreto en el cual exhortó a los establecimientos educativos a impartir clases de religión obligatoriamente, no quedarse únicamente con las clases de ética y moral sino incursionar en lo que ha establecido la Ley General de Educación de 1994: la cuarta área obligatoria es la educación en ética y valores, diferente a la sexta, que es la religiosa.

Hace mucho tiempo se habían abolido las clases de religión obligatorias, parece que de la modernidad, la educación colombiana iniciaría nuevamente una época feudal. Si vivimos en un Estado laico no veo razón alguna para que se les obligue a nuestros jóvenes a aprender doctrinas de una religión en particular.

¿No va eso en contra del derecho humano de primera generación, “todo individuo tiene derecho a la libertad de pensamiento y de religión”?

Si la propuesta fuera impartir una clase en la que el alumno se dé cuenta que las religiones han sido inventadas por los hombres para mantener sometido, de alguna manera al vulgo, sería estupendo pues nuestros niños no crecieran alienados culpando a Dios o a los capitalistas de todos sus males.

Parece que nadie se pone de acuerdo con el contenido a realizar. Sería una buena alternativa que enseñaran la historia de cómo empezó el asunto religioso, que los docentes hablaran tranquilamente de los lineamientos de cada grupo sin ninguna pasión, esto es sin proselitismo. En la actualidad existen grupos en busca de lo escatológico para todos los gustos. Así que los colegios no podrían quejarse de no tener abundante material didáctico al respecto.

Muchos pueblos han fundamentado su cultura en lo religioso. En cambio de llenar la mente juvenil de asuntos dogmáticos podrían aprender acerca del budismo, el hinduismo, el islamismo y todas aquellas filosofías que occidente ha tratado de ignorar pero que forman parte de la riqueza intelectual de la humanidad.

También podrían saber que dentro del cristianismo no sólo existe la iglesia católica sino todas aquellas que aparecieron como fruto de aquel fenómeno llamado la Reforma, cuando mucha gente de la mano de Lutero Zwinglio y Calvino le dijeron NO, al cuento de las indulgencias gestionadas desde el Vaticano.

Pero no me conformo con ese asunto de las clases de religión, para mí no deberían existir en los colegios estatales. ¿Por qué no insistir en la ética profesional, en la convivencia en paz, en la responsabilidad social, el civismo y en el “no hacer a los otros lo que no querríamos que nos hagan”?

Lo que debe parecer más importante, no es el tema religioso sino que los chicos a través de las temáticas dadas a nivel moral y de valores sean capaces de reconstruir en sus mentes una cultura crítica con relación a todas las situaciones que debe enfrentar el ser humano, y que también los haga aptos para intentar vivir sin violencia, sin lastimar a sus semejantes.

Para finalizar considero que es una acción excluyente adoctrinar a nuestra juventud en un tipo de credo específico, pues ello crea resentimientos que nada bueno traen en el ya difícil entendimiento social. Hay que pensar en lo que vaya mejor a la convivencia.

El pintor Fernando Botero


El pintor colombiano nacido hace 75 años ha marcado un hito en la historia de la pintura y la escultura, creo que a nivel internacional.

En un mundo en donde en las últimas décadas se le ha rendido pleitesía a la delgadez, este original artista se ha hecho famoso pintando y realizando esculturas de personas obesas.

No creo que sea necesario exhibir una biografía de ese genio pues apenas requiere presentación. Alguien que se interese por el arte sabe que su principal característica radica en el tratamiento que le da al volumen y a la forma.

Cuando yo pinto me introduzco en una especie de mundo mágico, la cuarta dimensión me aguarda y lo trasforma todo en un universo de estética y belleza.

Podría decir que cuando Botero se propone ejecutar una pieza de arte su mente entra en un entorno esférico, pues es la redondez la que se aloja en su intelecto para producir obras en donde el espacio, el gran volumen dan como resultado el arte de forma diferente.

En las ocasiones que he concurrido a exposiciones de la obra de Botero me ha parecido que existe cierta placidez en sus cuadros… hasta que asistí a la muestra de los 50 horrores de la cárcel de Abu Ghraib en Irak. Al parecer el pintor realizó esa serie como protesta ante un comportamiento inhumano. En alguna entrevista dijo:
“Siempre había hecho imágenes placenteras, pero en el momento en que dibujé el primer boceto sentí que me corrió una furia, estaba enojado. Me sentí mal de saber que lo que sucedió no es lo correcto, cómo podía ser posible”.

Retorno de un largo feriado


Siempre que hay unos días extras de vacaciones las carreteras se congestionan, a veces hay accidentes, la circulación se torna lenta y con paradas esporádicas y, sobretodo al regreso, los viajeros se ven afectados por las retenciones en las carreteras debidas a múltiples causas.

El anhelo de dejar la ciudad para cambiar de clima o de lugar, o como parte de un descanso es señal de bienestar y deseo de vivir una existencia plenamente. No es necesario ser muy adinerado para desplazarse y buscar distracción diferente a la que se encuentra en la ciudad en un fin de semana.

Esos viajes a lugares turísticos traen infinidad de beneficios no sólo a quienes parten en busca de placer, sino principalmente a todos aquellos a quienes
su sustento depende de la cantidad de personas que visiten sus pueblos, balnearios, posadas, hoteles, restaurantes, etc.

Cuando el turista vuelve a casa imagina no solo los hermosos lugares que ha visitado o que ha re-encontrado sino que bullen en su mente infinidad de rostros, fragancias, sonidos, sabores y, sobretodo, miradas…

Sí, definitivamente existen miradas que alegran, que agradan, que cautivan, que seducen,
que regocijan, que entusiasman, que encantan, que deleitan, que recrean, que llegan muy dentro.

Pero también están aquellas que inquietan, que impresionan, que perturban, que interrogan, que mortifican, que afligen, que interpelan, que hacen reflexionar si ha sido una buena decisión ese viaje.
Es en ese punto cuando comienza una interminable lista de situaciones en la mente y se llega a la conclusión que la intervención del turista es básica para que esas personas subsistan. Y de otro lado... ¡qué bueno estar de nuevo en casa!

El vaticano en reversa II y la Teología de la liberación


El doctor David Sánchez Rubio, profesor de Filosofía del Derecho de la Universidad de Sevilla (España), en la página 46 de su libro “Filosofía, Derecho y Liberación en América Latina”, dice que la Teología de la liberación es un movimiento filosófico contemporáneo que surgió en nuestra América latina a comienzos de los años 70, y se dedicó a desarrollar temas comunes relativos a conceptos de pobreza, dependencia, liberación, identidad cultural y humanismo entre otros.

La realidad latinoamericana, reflexionada y profundizada a la luz de la fe en la teología de la liberación, había ofrecido reorientación y hasta el momento había rejuvenecido la tarea del cristianismo y de la Iglesia católica, pero la jerarquía de esa iglesia siempre silencia lo que le parece inconveniente.

Siempre he creído que la verdadera teología brota de una espiritualidad, o sea del verdadero encuentro con Dios en la cotidianidad y en la historia. Fue así como la teología de la liberación nació cuando la fe de algunos sacerdotes afrontó la injusticia existente con los desposeídos y con todas las masas populares pues la realidad es que la iglesia católica siempre ha estado al servicio de las clases pudientes en las grandes ciudades con instituciones educativas para gente de estratos 5 y 6; no se ha visto que haya alguna escuela de propiedad del clero que sea para niños de las masas populares o si existe alguna es subsidiada por los clientes de bancos que reciben mensualmente cartas para que se adhieran a una causa pagada por ellos, pero el crédito se lo lleva la iglesia.

La teología de la liberación ha propugnado la opción por los pobres, pienso que con ello quiere la concienciación y la reflexión sistemática de sus propios límites y de los contextos de emergencia socio-culturales, anhela hallar el camino de la justicia social, desarrollo integral para tratar de erradicar la pobreza y las situaciones de opresión y violencia institucionalizada.

Los representantes más conocidos de este movimiento son: en Perú, Gustavo Gutiérrez a quien se le considera el pionero; en Brasil, Leonardo Boff, Juan Bautista Libânio, los obispos Pedro Casaldáliga y Helder Cámara; en El Salvador Jon Sobrino; en Chile el teólogo Ronaldo Muñoz, en Uruguay el jesuita Juan Luís Segundo. Todos ellos han sido amonestados por sus ideas o simplemente los han hecho callar.

El jesuita catalán llamado Jon Sobrino, residente en El Salvador desde hace muchos años, ha sido el último de la lista en ser censurado. En marzo de este año la lupa inquisitorial de la Congregación para la doctrina y la fe ha condenado su obra, acusan a Sobrino de "anteponer el Jesús histórico a su carácter como divinidad".

La opción por los pobres ha levantado polémica ante circunstancias mundiales y eclesiales distintas: para los latinoamericanos “pobre” significa el oprimido, el proletario, una persona explotada que lucha por su emancipación; muchas veces puede ser el miembro de una clase social que lucha para salir de un medio explotador y opresor. Es por ello que la Teología de la liberación desde el comienzo ha suscitado recelos en la jerarquía católica que la considera muy próxima al marxismo; pues para ellos la concepción de “pobre” es el humilde, el que confía en Dios. ¡Vaya! Cuestión cultural.

Por esas razones veo que el Vaticano está en reversa.

El Vaticano en reversa I

El Vaticano, el más pequeño de todos los Estados existentes en nuestro planeta (con una extensión de 0,439 km² ), que por cierto, no se encuentra en estado de Derecho pues allí las mujeres no tienen los mismos derechos que los hombres (mentalidad patriarcal), ha dado nuevamente qué decir: algunas veces nos ha sorprendido por su manera tan radical de ver ciertas circunstancias, como el control de la natalidad, en otras ocasiones se porta muy benévolo con quienes han emprendido una guerra y en este año se ha “lucido” nuevamente con sus mandatos.

¿De qué hablo?
El día martes 13 de este mes será inolvidable para mucha gente que practica el catolicismo, Joseph Ratzinger, quien actúa en su puesto de jefe de la iglesia católica con el nombre de Benedicto XVI, divulgó su primera exhortación apostólica con el título Sacramentum Caritatis (El sacramento de la caridad).

Ese documento insta a los obispos a la lucha ideológica, a un catolicismo militante, tanto "en el testimonio de la propia fe" como en la defensa de "valores innegociables" como la oposición a la eutanasia, al aborto, al divorcio, a la unión entre homosexuales.

Quien desee ser sacerdote deberá tener muy claro que el celibato ha quedado bien sentado nuevamente, pues la cabeza de la iglesia lo reiteró al considerarlo "una riqueza inestimable".

Pero lo que ha dejado más atónitos a la mayoría de creyentes católicos es el regreso al pasado pues el documento “propone” nuevamente la misa en latín, para ello don Benedicto XVI ha hecho un llamado a los sacerdotes a prepararse para "entender y celebrar la misa en latín". También desea que el canto gregoriano sea el que impere en las celebraciones y quedan limitadas las formas musicales alternativas, como el folklore o el rock. Al parecer intenta superar así el cisma con el ala ultra-conservadora de su Iglesia.

El fallecido arzobispo francés Marcel Lefebvre fundó en Suiza la Sociedad San Pío X en 1969 en oposición a las reformas del Concilio Vaticano II, fue uno de los más conocidos opositores a la supresión de la misa en latín y se separó de la Iglesia católica en 1988, tras diferencias por esas y otras reformas. Él fue excomulgado luego de consagrar a cuatro obispos sin el permiso del Papa.

Sé que el latín jamás ha sido suprimido de ciertas liturgias, sobretodo aquellas difundidas para varios países y también todos los documentos del Vaticano salen en ese idioma; pero querer volver atrás con una medida que ya ha sido erradicada no me parece bien. El argumento de querer acercar el ala ultra-conservadora de la iglesia lo veo como una clara señal de vivir totalmente alejado del tiempo que nos ha tocado vivir y de la realidad.

Aunque la proposición de la misa en latín sea para ocasiones especiales, es muy probable que luego se vuelva costumbre pues ha dicho muy claro que los sacerdotes deben aprender el mencionado idioma.


Ignoro si don Ratzinger ha reflexionado tranquilamente sobre los efectos que ciertas decisiones tienen en la sociedad, sobretodo en la juventud, pues es a ellos a quienes directamente se les cierra las puertas de una iglesia que ha sido en extremo conservadora. Por lo menos a los latinoamericanos nos encantan las celebraciones con guitarras y música alegre.

Es innegable que una celebración religiosa con música gregoriana es mucho más solemne y no deja de tener su encanto. Pero los tiempos y los gustos cambian y esos ritos deberían ser en un lenguaje que comprendan los que estén presentes y con
música más cercana a su idiosincracia.
Don Ratzinger en su afán de acercar a los
seguidores de Lefebvre ha olvidado que dentro de la tolerancia que proviene del amor predicado por Cristo está el respeto a las singularidades de cada cultura y que la iglesia debería comprender las diferentes realidades sociales.

Existen otros puntos que inquietan, pero los tocaré en la próxima.

No, a la guerra


Apenas un poco atrasada pues sólo puedo publicar mi página el jueves que es el día en el que tengo menos trabajo. De todas maneras nunca será demasiado tarde para manifestar el descontento por las acciones bélicas en contra de una población cuya única falta ha sido vivir sobre un terreno lleno de petróleo.

Me uno al llamado mundial para que termine la absurda guerra en Irak y en cualquier parte del planeta en donde no se diriman las diferencias mediante el diálogo sino a través de la cobarde utilización de la fuerza y el horror de las armas.

Hace cuatro años que Irak se encuentra sumido en el caos, la violencia devastadora y la guerra cruel que ha dejado decenas de miles de muertos, aunque nadie puede decir con exactitud cuántas bajas ha dejado esa confrontación que el pueblo iraquí jamás ha buscado.

Aunque nos separen los idiomas, las diferencias culturales y la distancia, debería unirnos una misma visión del mundo: oponemos a las guerras hegemónicas, la tiranía, el terror y la muerte de civiles inocentes. Desde nuestro entorno digamos un NO rotundo a las acciones bélicas.

Bush en Sudamérica


Cualquier persona con un poco de raciocinio sabe que la visita de Bush ha sido un fraude político. Da la impresión que USA se ha puesto alerta con el advenimiento del socialismo en algunos países Latinoamericanos y ha querido contrarrestar la influencia, cada vez mayor del coronel Chávez, además de adelantar ciertos convenios con algunos países, quizás con el propósito de no perder hegemonía.

En cada país visitado (Brasil, Uruguay, Colombia, Guatemala y México, en N.A) se ha montado
un operativo de seguridad sin precedentes. La gira que el presidente estadounidense, George W. Bush, ha iniciado el jueves pasado en Sao Paulo ha sido catalogada como una visita de trabajo y negocios. Yo diría de maquillaje a las verdaderas estrategias estadounidenses pues en estos mismos días han visitado fábricas en Estados Unidos y han detenido a los indocumentados que han encontrado.

En los países que ha visitado, ese presidente, siempre ha habido manifestaciones de rechazo. No sólo ocurre esto en Latinoamérica sino a nivel de todo el mundo, quizás porque donde ha puesto sus ojos siempre ha dejado muerte y desolación.

No sólo izquierdistas son quienes han protestado; han sido también intelectuales, artistas, ecologistas, obreros, estudiantes, sindicalistas, militantes de partidos opositores…

Es ridículo decir que Bush haya traído una “agenda positiva”, pues lo positivo será para las grandes empresas estadounidenses que son los que siempre se benefician con los tratados.

Bogotá estuvo literalmente blindada:
Helicópteros artillados surcaban los cielos, muchos francotiradores estuvieron apostados en los edificios más altos, miles de tropas patrullaron las calles para evitar posibles incidentes, muchísima gente fue requisada (hasta los militares que estarían presentes en el aeropuerto militar), las entradas a la ciudad se cerraron, la urbe parecía en estado de guerra con tanques y hasta más de mil gringos que pusieron cámaras y no sé cuántas señales por donde pasaría su mandatario. ¡Qué abuso!

El domingo durante la breve visita de Bush a nuestro país andino que ha vivido un largo conflicto armado y libra una guerra contra las drogas, la capital tuvo a su población prácticamente sitiada, pues se cerraron hasta las ciclo-vías que tanto bien hacen a los niños y jóvenes los fines de semana.

A muchos nos preocupa el llamado Plan Colombia que, al parecer, ha servido para estimular la guerra en el país, para que haya más sufrimiento, más víctimas, el ecosistema a punto de colapsar por el glifosato y el dolor haya aumentado para los familiares de los secuestrados, sin que se hayan solucionado las causas de fondo del conflicto armado.

¡Lástima que ese tipo de visitas son netamente protocolarias y prácticamente ningún presidente latinoamericano se ha atrevido a plantarle cara al estadounidense! Nadie, que yo sepa le expresó la preocupación de la visión en una sola dimensión que posee USA en relación a todos los problemas actuales del mundo; sobretodo en materia medioambiental y lo concerniente al consumo de estupefacientes pues la producción no aumentara si la demanda no fuera alta.
Mejor me voy a dormir, para no seguir pensando cosas feas.

Gabriel García Márquez


Estaba en “La hojarasca” departiendo con algunas amistades, me disponía a salir pero me detuve pues en ese momento había una especie de embotellamiento en la calle debido a “Los funerales de la mama grande”, gracias a ello no me perdí de los últimos chismes acerca de que “El coronel no tiene quien le escriba” o que “La increíble y triste historia de la cándida Eréndira y su abuela desalmada” querían llevarla al cine pero no han podido porque han tenido esa magnífica idea “Cuando era feliz e indocumentado” el director y lo ha perseguido un policía que tenía “Ojos de perro Azul” por meterse en otoño a la casa del patriarca a quien le preocupaba su salud y pensaba en “Crónicas de una muerte anunciada” por haber tenido ciertos deslices y hacer “El amor en los tiempos del cólera”…

Así que el patriarca estaba viendo su futuro como “El general en su laberinto”, juró olvidarse “Del amor y otros demonios” pues por un descuido podría llegarle “La mala hora” como lo escuchó en “El relato de un náufrago”.

Mientras se deleitaba con “El olor de la guayaba” vio la “Noticia de un secuestro”, el infortunado era uno que repetía una y otra vez que sólo tenía la “Memoria de mis putas tristes” pero al ser liberado se enteró que le esperaban “Cien años de soledad” porque su esposa se había ido con otro.

¡Vaya! Por “La bendita manía de contar”, no precisamente los “Doce cuentos peregrinos”, no he dicho cuál es el meollo del asunto:
Pues me he vestido de gala para asistir a la gran fiesta que celebra el mundo hispano para conmemorar los primeros 80 años de vida de Gabriel García Márquez, el genio de la narrativa colombiana.

No he alcanzado llegar a la Casa de América en Madrid para la lectura de Cien años de soledad, tampoco he podido asomarme al homenaje en Cartagena, menos aún en Aracataca, que ha comenzado con 80 cañonazos al alba… pero sí estaré en el banquete que se ofrecerá en Villa Encantada.

Imagino que el salón estará adornado con bellísimas imágenes de fantasía, asistirán algunos personajes que nos son familiares:
José Arcadio Buendía, su esposa Úrsula Iguarán, sus hijos José Arcadio, Aureliano y Amaranta, también Prudencio Aguilar, Pilar Ternera, Leticia Nazareno, Florentino Ariza, Fermina Daza, Santiago Nasar,
los hermanos Vicario, Sierva María de Todos los Ángeles, Cayetano Delaura, Rosa Cabarcas… Mauricio Babilonio rodeado de hermosísimas mariposas amarillas vendrá hacia mí, querrá bailar… lo esquivaré y me dirigiré al homenajeado:

¡Felicidades Gabo!
Me alegro que mi Dios te haya dado tanta imaginación para alegrar nuestra existencia y te haya dejado “Vivir para contarla”; tu admirable vida.

Una verdad incómoda


Me agradó que le otorgaran a 'An inconvenient Truth' (Una verdad incómoda) el premio Óscar a mejor documental pues en él se exponen las nefastas consecuencias del calentamiento global, alerta a los espectadores y trata de concienciarlos para que, al menos logremos parar el ritmo de acontecimientos de degradación ecológica que hemos comenzado a vivir por nuestra desidia.

Luego de observar ese documental me hice el propósito de sembrar más árboles, no olvidar seleccionar la basura, ahorrar energía eléctrica, no utilizar aerosoles y ser parte activa de alguna organización ecológica.

Pero me he dado cuenta que en el país en donde debía la gente ser más consciente del daño que le hemos hecho a la madre tierra, en cambio de reaccionar para tomar medidas que no aumenten el problema, hacen caso omiso o emprenden polémicas absurdas como la crítica hecha al ex vicepresidente Al Gore por su elevada factura de pago de energía eléctrica.

¿Quién puede ser tan necio que en lugar de utilizar su diario para dirigir una gran cruzada a favor del medio ambiente, lo pone al servicio de oscuros intereses?

¿No será que les ha, realmente, incomodado la verdad que expone el documental?

Este es un momento para reflexionar, para tratar de utilizar transporte colectivo aunque no sea tan cómodo como cuando vamos en nuestro propio medio de movilización pues de esa manera contaminaríamos menos.

También los fumadores deberían
pensar que están contribuyendo a enrarecer más la atmósfera, sería bueno que comiencen a prescindir del cigarrillo que nada bueno trae a la salud, principalmente a las mujeres les convendría dejarlo, ese humo les hace aparecer arrugas prematuras, además puede causar mucho daño si está en estado de gestación.

El film presenta una conferencia muy bien documentada, apoyada con gráficos e imágenes de la realidad que hemos empezado a vivir. Es como si Al Gore hubiese sentido el grito de auxilio de nuestra madre tierra y nos lo hubiera transmitido de manera magistral y muy pedagógica.
Todos deberíamos tratar de difundirlo y empezar una cruzada mundial en favor del medio ambiente.

Carnaval


Aunque el origen de estos festejos proviene de tiempos remotos, etimológicamente, la palabra "carnaval" fue acuñada en Europa, a fines del siglo XV. Derivada del término italiano "carnevale" y ésta a la vez del latín carnis tollendus, la carne que se ha de quitar. La procedencia del vocablo nos permite observar cierta ambigüedad en el origen de la fiesta del carnaval: por un lado, de carácter religioso, fortalecido en la Europa medieval; y por el otro, satírico - pagano, vigorizado por la tradición popular.

Esta festividad precede a la cuaresma que es la etapa más austera del año para el mundo cristiano. Ha de ser por ello que en estas fechas se permite la extravagancia, la locura, el exceso, el desenfreno, la ruptura de tabúes… pues hasta el más serio
puede sucumbir a la tentación de esconderse bajo un antifaz y disfrutar sacando a la luz su verdadera personalidad.

Muchos de los elementos del carnaval, como las máscaras, antifaces o los disfraces, tienen su origen en los tiempos del imperio romano. Al celebrar las fiestas en honor a Baco y Saturno se invocaba el favor de los espíritus de los muertos. Una persona se vestía de blanco y con una máscara en el rostro representaba a los muertos. De aquella época ha quedado la tradición del entierro del carnaval.


En la actualidad esta festividad ha unido las costumbres festivas pre-cristianas, las del medioevo, el teatro de la calle y hasta el circo. El carnaval que más me ha agradado es el de Venecia, pero creo que para todo el mundo el carnaval por antonomasia es el de Brasil. Son dos estilos muy diferentes, el uno se vive en el invierno septentrional y el otro en el verano austral.

Al presidente colombiano Álvaro Uribe


Estimado doctor Uribe:

Como colombiana he apoyado sus proyectos enrumbados a mejorar la seguridad interna de nuestro país y reconozco que su gestión ha dado como resultado el poder transitar tranquilamente por las carreteras de la Nación y que además nuestra economía haya tenido un crecimiento aceptable dentro del marco político que vive el país. Quiero, doctor Uribe, comunicarle algunas inquietudes que tengo.


El gobierno de Colombia ha fumigado cultivos ilícitos, desde hace años, con el herbicida glifosato y lo ha hecho incluso en regiones que son reservas naturales, contraviniendo de esa manera normas nacionales, tratados internacionales y acuerdos con comunidades indígenas y campesinas.


Si en la guerra contra las drogas y los narcotraficantes, tanto el gobierno de Colombia como el de Estados Unidos tienen mucho interés en la protección ambiental y de la salud humana en Colombia ¿por qué utilizan un producto que deteriora nuestros ecosistemas?


¿Por qué, doctor Uribe, usted que es tan amigo del señor Bush no le pide que mejor acabe con el consumo que existe en su país? De esa manera el negocio se vendría abajo pues no hay oferta sin demanda. Mejor aún, con tanta tecnología que tienen los estadounidenses podrían “saber” en dónde están los laboratorios y los narcotraficantes y terminar con el asunto de una vez por todas; o ¿será que eso que ellos pueden detectar en donde se encuentra cualquier persona es puro cuento?


Posiblemente todos aquellos que vivimos en las grandes ciudades no podamos percibir cuál es el verdadero alcance de dichas fumigaciones porque no estamos cerca de los lugares en donde la gente enfrenta a diario las consecuencias negativas del producto empleado; sobretodo que al efectuar las fumigaciones aéreas el glifosato no solo rocía los cultivos indebidos sino también aquellos que son el alimento diario no sólo de nuestros campesinos, sino de nosotros mismos.

Señor Presidente, ¿acaso no tienen derecho todas las personas residentes en Colombia a la protección, a la seguridad y salubridad pública violadas por la Dirección Nacional de Estupefacientes y demás entidades encargadas?


Soy partidaria de la erradicación de esos cultivos,
sé que destruirlos es una obligación legal y moral de las autoridades; ignoro cómo se podrá acabar con la producción, y tráfico de estupefacientes, pero debe existir otra manera, debe haber alguna estrategia que no vaya en detrimento de la salud y bienestar de nuestros campesinos que son quienes han sufrido con todos los males del país; pues siempre se habla de atropello al medio ambiente, pero no se quiere decir que eso constituye un problema social, que es la crisis del sector agropecuario, especialmente en los departamentos que viven de las pequeñas parcelas.


El 10 de febrero del año en curso leí en El Tiempo de Bogotá, que el Presidente de Ecuador piensa demandar a nuestro país. El señor Correa en una cadena radial ecuatoriana ha dicho textualmente:

''Utilizaremos mano dura contra lo que consideramos una agresión... Vamos a demandar penalmente a Colombia ante el tribunal internacional de la Haya por el daño que nos ha causado la decisión unilateral de bombardear con glifosato la frontera''.

Claro que el vocablo “bombardear” no es el más adecuado para quien desea hacer un reclamo respetando la soberanía y las razones que tenga el otro país. Pero si la molestia ecuatoriana no se resuelve tranquilamente ¿qué hará usted, señor Presidente con todos nuestros conciudadanos, desplazados o no, que están viviendo en ese país?

¿No habrá cómo arreglar ese asunto de manera diplomática? Nuestro país se ha caracterizado por tener diplomáticas y diplomáticos excelentes.

¿No sería saludable que el gobierno colombiano se haga cargo de la gente que ha tenido que salir de sus tierras huyendo de la violencia?


¿Parte del dinero que recibe el Estado, ya sea vía impuestos y aquella platica que envían de gringolandia no es precisamente para programas de atención a los pobres desplazados?


¿Cree, usted doctor Uribe, que si los ecuatorianos piensan que las fumigaciones aéreas en la frontera son un acto inamistoso, como ha dicho su ex canciller Francisco Carrión ante la OEA, ellos, que francamente tienen tendencias chauvinistas bastante marcadas, tendrán consideración con los miles de colombianos que en este momento se encuentran en ese país?


Si, usted señor Presidente, cree que las fumigaciones son el único camino para eliminar las plantaciones de coca, ¿por qué no las ejecutan con esos aparatos que se llevan en la espalda y que rocía únicamente aquellos cultivos que no queremos que existan?


Todos sabemos que la aspersión aérea es inexacta, por lo tanto dañina. Sería bueno que sus subalternos revisen lo del manejo ambiental, que se instruyan en las verdaderas consecuencias negativas o colaterales que se producen al utilizar el glifosato, sobretodo a largo plazo. Por otro lado, me parecería muy acertado reflexionar acerca de por qué el gobierno de Afganistán, que necesita urgente el apoyo económico de USA, a pesar de todo se ha negado a utilizar dicho producto en su territorio.

Bien, señor Presidente, tengo otras preocupaciones para comentarle pero sé que su tiempo es limitado. Próximamente le enviaré otras líneas.

Cordiales saludos a su señora esposa y a sus niños.