Espero que en su día todas las madres, mamás, mamas, mamacitas y mamitas se sientan muy queridas, que no olviden aceptar a los hijos como son, pues son las diferencias las que los hacen únicos e irrepetibles.
Que sea un día lleno de tanta ternura, que hasta los comerciantes se den cuenta que el afecto no tiene precio, que el niño, el joven o el hombre que rinda homenaje a su progenitora, sólo le baste con obsequiarle el más amoroso de los abrazos, que los besos llegan por añadidura.
¡Felicidades!
2 comentarios:
Felicidades a todas, incluyendote a ti Rud, obviamente y de manera muy especial
Muchísimas gracias; de paso debo decir que mi Dios me bendijo con unos hijos realmente maravillosos.
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